viernes, 18 de marzo de 2022

TÚNELES DE RUTU MODAN COMIC

Túneles de rutu modan, comic tbeoynolocreo salamandra Penguin
Salamandra/Penguin Random House.
Barcelona, 2021
288 páginas, 24 euros


¡SOY MINERO!
Rutu Modan lleva ya años alegrándonos la vida. No es que todas sus historias sean pura comedia, ni mucho menos.


Pero siempre resulta fascinante comprobar cómo un creador consigue mejorar obra a obra. Sorprendió con “Metralla”, de estilo todavía inseguro, Confirmó su talento con “La propiedad” y deslumbra con este su último trabajo. Por el camino hemos reído con su cuento infantil “La cena con la reina”. Y el humor vuelve a estar muy presente en “Túneles”. Su dibujo ha ido mutando, a partir de unas referencias fotográficas quizás demasiado evidentes, hasta afinar su personal variación de una línea clara sin pretensiones. Viendo su trabajo no puede evitarse pensar en Hergé y, al mismo tiempo, apreciar las diferencias. A Modan no parecen importarle mucho ciertas torpezas del dibujo, con lo que sus acabados siempre son menos académicos que los del maestro belga. En cambio encuentro más parecidos en la construcción dramática. A ambos les gusta abordar temas serios, complicados. Y los dos los resuelven empleando cargados elencos de personajes, que humanizan la trama y le aportan variedad de puntos de vista y humor. Nada es lo que parece.

Esta novela gráfica resulta ligera, entretenida y bienintencionada. Como la propia autora comenta en el interesante epílogo, no se puede confundir un cuento con la realidad. El cuento se rige por sus propias reglas, aunque sí que debería de contener algún tipo de verdad. Fiel a esa premisa, explica que quería ofrecer las diferentes visiones de un conflicto como el de los palestinos y los judíos, entrelazados con los relatos que ambos pueblos han levantado para explicarse los hechos a sí mismos. Pero es consciente de que el final que ha elegido quizás no complazca a todo el mundo. Es el que ella quería, su deseo para el futuro. Y no digo más.

Túneles Rutu Modan viñeta comic tbeo
Todo funciona como la seda en un argumento perfectamente estructurado. Se parte de una protagonista muy temperamental, una estresada madre que carga con un niño especial y sobre la que pesa la alargada sombra de un padre tan prestigioso como trastornado. Arqueóloga como él, lucha contra las instituciones que ignoraron los esfuerzos de su progenitor, planteando el viejo conflicto entre los eruditos que no saben nada de la realidad y los prácticos que haciendo trabajo de campo no consiguen desarrollar una carrera académica. A ese primer enfrentamiento se van sumando otros muchos: entre la iniciativa pública y la privada, entre hermanos, entre árabes y judíos, ricos y pobres, religiosos y científicos, hombres y mujeres, etc, etc.

Una tablilla parece indicar el lugar exacto donde se halla el Arca de la Alianza, que es justo al otro lado del muro que separa a judíos y palestinos. Así que se inicia una trepidante carrera en la que todos mienten a todos, a la caza del tesoro más deseado por historiadores, coleccionistas, universitarios, militares… El ritmo no decae en ningún momento y la autora se encarga de sazonar la acción con constantes toques de un humor siempre inteligente. Bien a través de los secundarios, con el grupo de obreros a la cabeza del cachondeo, o gracias a las manías de los protagonistas, supuestamente más inteligentes. Como ella explica, al final lo que importa no es tanto el Arca como la Alianza. Cuando lo lean lo entenderán.

Es una obra mayor que confirma a Modan como una de las grandes autoras de referencia en la actualidad.