48 páginas, 18 euros
POR LAS NUBES CON YANN
Yann se ha colocado definitivamente en el Olimpo de los grandes guionistas europeos, al lado de gigantes como Greg, Charlier o Van Hamme.
Casado con la historia
Una buena parte de su carrera la ha dedicado a los tebeos históricos, colaborando con artistas académicos, aunque sus series de aventuras en ambientes bélicos o de espionaje han transitado casi todos los grados de iconicidad. Con el sintético Konrad en “Los innombrables” o “La tigresa blanca” (2005). Con Chaland en “El cometa de Cartago” (1986), “Vacaciones en Budapest” (1988) y “F52” (1989). Pero la serie en la que Yann aúna con más fortuna los componentes históricos y aventureros es “Pin-up” (1994-2011). Su dibujante Berthet va un paso más allá en la descripción realista de los escenarios, pero todavía se mantiene en un plano muy “de cómic”, línea-clarista. A lo largo de nueve álbumes se nos brinda una versión de la historia de los Estados Unidos durante la IIGM y los años de la posguerra, acabando con un episodio dedicado a Hitchcock. Con un ritmo trepidante, la saga explica los diferentes roles de la mujer en esos tiempos de transformación, confrontando la realidad con los estereotipos. La protagonista es una de aquellas pin up que posaron para tantos fotógrafos del momento, pero que también podía servir de inspiración para dibujantes de comics como el que aparece, una referencia poco discreta a Milton Caniff. Contiene muchos momentos de humor y de erotismo y salta sin complejos del drama a la comedia. Narrativamente es muy sofisticada, con una estructura de página peculiar. Rompe con una idea muy extendida sobre las viñetas verticales situadas a la derecha de la plancha. Tradicionalmente se desaconsejan, ya que pueden provocar cierta ambigüedad de lectura. Sin embargo los autores las usan de forma constante y eficaz. Hay aventuras en Hawai, espías rusos y citas a Playboy, todo cabe en un trabajo desbordante, un clásico automático. Produjeron una serie secundaria, “Poison Ivy”, dando vida a un personaje que aparecía en una tira de prensa en “Pin Up”. Era divertida pero también un producto menor, en comparación con el original.
“Sauvage”, (2018), una fantasía sobre la revolución mexicana, completaría el repaso por sus series históricas. En principio podríamos pensar que nos hayamos ante uno más de los westerns mexicanos que periódicamente lanza el mercado francés, como ciertos episodios de Blueberry, el McCoy de Hernández Palacios o la serie “Los Gringos”. Pero Yann desplaza el argumento a su terreno, empleando la convulsa política mexicana como telón de fondo para uno de sus guiones con personajes atrapados por un destino del que no pueden escapar.
Amante de los aviones
Si hay un terreno en el que Yann ha conseguido destacar es en
Leer más...