DOS BUENAS AMIGAS
El estreno de la película dedicada a Harley Quinn ha propiciado un pequeño boom. A la serie de animación sobre la (ex) novia del Joker se suman varios comics, tanto nuevos como reeditados.
Harleen. Libro Uno
Stjepan Sejic
ECC. España, 2020.
de A priori el más interesante debería de ser el que viene firmado por Stjepan Sejic, conocido sobre todo por su serie “Sunstone”.
Si en aquella fantasía sado-maso encontraba un delicado equilibrio entre la monería y la brutalidad y su encantador dibujo suavizaba las aristas de un relato protagonizado por pavas aficionadas al látigo y el cuero, aquí no acaba de dar con el tono adecuado.
Construye una especie de “Harley Quinn Año 1”, donde se nos narran los antecedentes de la psicóloga chiflada. Pero todo resulta redundante y pretencioso y acabamos hartos de personajes encantadores y sonrisas monas. Falla en las escenas de acción, que se quedan en cromos muy poco dinámicos, se le encasquillan las actuaciones de los personajes, teatrales y poco convincentes, y no acierta con el Joker, a quien retrata como una especie de estrella del rock, un señor Grey no exento de atractivo. Demasiadas páginas para contar más bien nada. Y además, es solo el primer episodio.
Paul Dini & Bruce Timm.
Harley y Hiedra
ECC. España, 2018.
136 páginas, 15,95 euros.
Mucho más afortunada es la reedición de “Harley y Hiedra”. Conecta con la última versión del personaje, que se ha librado del pesado de su ex, el Joker, e intenta vivir su propia vida acompañada por su mejor amiga, Hiedra Venenosa. Esta última, compañera en el crimen y con la que comparte piso, no oculta en la serie de animación unos sentimientos de los que Harley parece no percatarse nunca.
La cuestión es que el volumen incluye tres historias, la última de las cuales firma Joe Chiodo y es preferible olvidar.
La primera es un divertimento de Ronnie del Carmen, simpática, muy bien dibujada y de narrativa chispeante. Por supuesto lo mejor corre a cargo de los creadores originales de Harley. Si en su momento el comic de presentación, “Mad Love”, constituyó una auténtica cumbre de lectura obligada y revisión más que recomendable, Paul Dini y Bruce Timm vuelven a demostrar que son los que mejor entienden al personaje y su volátil psicología. Harley es una chiflada pero también un arlequín, una payasa, y en ningún momento debería de abandonar su tono desenfadado, siempre tan atolondrada como chispeante.
En una clásica estructura en tres actos se nos cuenta en primer lugar la entrada y fuga de la cárcel. En el nudo las chicas se trasladan a las selvas amazónicas en busca de una misteriosa planta. Ya de vuelta a casa se detienen en Hollywood donde deciden rodar una enloquecida película. Finalmente Batman pone a todo el mundo en su sitio y las chicas vuelven al trullo, más o menos. Por el camino se nos brindan algunas pinceladas sobre la imposible relación entre esas dos amigas tan diferentes y las viñetas se saturan de chistes que en ocasiones recuerdan los tiempos más gloriosos de Mad.
El increíble dibujo de Timm asegura un ritmo trepidante y las dosis justas de humor y sensualidad. Él y Dini tienen el secreto de una fórmula que parece fácil de imitar pero que nadie asimila (y desarrolla) tan bien como ellos. Hay apuntes ecológicos y cierta burla de las costumbres de la meca del cine. Pero sobre todo lo que cuenta es la sucesión de hechos, el encadenado de secuencias y bromas hasta la traca final. Un cómic sin pretensiones, maravillosamente dibujado y que no deberían perderse.