viernes, 15 de febrero de 2013

MENSAJES EN UNA BOTELLA de B. KRIGSTEIN

Mensajes en una botella. Lo mejor de B. Krigstein. Edita Diabolo ediciones
Diabolo Ediciones. Madrid 2012.
272 páginas, 34,95 euros.

BERNARDO EL RARO

Siguen llegando recopilatorios de clásicos americanos. Ahora le ha tocado el turno a uno de los más peculiares: Bernard Krigstein.


Conocido por su deslumbrante recorrido en la EC, el volumen nos permite echar un vistazo a trabajos anteriores así como repasar sus historietas más populares, entre las que destaca “Master Race”. Krigstein fue un fenómeno tan extraño como breve. De formación clásica, su tránsito por el comic obedeció a razones estrictamente económicas. En cuanto pudo lo dejó para dedicarse a su verdadera pasión, la pintura. También ejerció como profesor y entre sus alumnos se contó Larry Hama. Éste último recordaba una ocasión en que Krigstein les había encargado un conjunto de dibujos y él no pudo acabarlos todos. “¿Por qué no me entregas todo lo que te he pedido?”, le preguntó el maestro. “Cuando consiga hacer dibujos lo bastante buenos se los traeré”, replicó el joven Hama. A lo que Krigstein contestó: “Para conseguir hacer un único dibujo bueno tendrás que hacer antes el montón de dibujos malos que te había pedido”.

Lo cierto es que este recopilatorio nos permite aprender mucho sobre el arte de Krigstein. Por un lado que siempre fue peculiar. La forma abrupta en que entinta, con tremendos contrastes entre luz y sombra y una línea habitualmente desgarrada, el manierista movimiento de sus personajes, que nunca se conforman con las posiciones acostumbradas… todo nos habla de una personalidad gráfica diferenciada y singular. Pero además deben sumar a ello sus constantes juegos con la estructura de página y el fraccionamiento de las viñetas. Si a alguien se parece es a Crepax, a quien adelanta una década en los juegos con una línea muy descarnada y el empleo de la fragmentación y la multiplicidad de viñetas. En ocasiones tanta densidad llega a resultar agobiante pero no puede negarse que las últimas historietas del volumen son de una modernidad que asombra.
Viñeta de Bernard Kirgstein del libro "Mensajes en una botella". Diabolo Ediciones

Sumen a ello una buena dosis de material complementario, incluyendo la reproducción cuidadosa de algunos originales, unas notas muy documentadas y la reconstrucción del color a cargo de Marie Severin. El conjunto es altamente recomendable y nos permite apreciar la evolución del autor y la cima de sus esfuerzos creativos. Ya he citado su obra más conocida, ese paseo por los horrores del Holocausto judío desde el metro de Nueva York. Una historieta increíble, no sólo por lo poco acostumbrado del tema sino también por los recursos cinéticos y de lenguaje que emplea cuando no directamente inventa. Pero hay más, como la de las catacumbas, por supuesto “Pipe dream” o “In the bag”. Aunque yo siempre he sentido debilidad por la fría dramaturgia de “The flying machine”, un relato tan corto como intenso y donde abandona sus trucos narrativos para desplegar la historia de la forma más seca y efectiva posible. Una pequeña pieza de relojería emocional.