viernes, 16 de junio de 2017

NUEVA OLA DE LA BD

Poco a poco todo un batallón de dibujantes francesas viene a sustituir a las clásicas Goetzinger o Bretecher. Perfectamente integradas en un mercado que espera con impaciencia nuevos productos facturados por mujeres, sin prisa pero sin pausa cada día aumenta la lista de autoras a tener en cuenta.


Tras la adaptación cinematográfica de su Rosalie Blum, Camille Jourdy es probablemente la más popular en la actualidad. Se lo merece, su labor es original y sofisticado, tiene cosas que contar sobre gente aparentemente vulgar y su dibujo es tan especial como delicado.

La levedad de Catherine Meurisse, edita Impedimenta comic BD mujeres
La levedad de Meurisse 
Impedimenta, 2017
136 páginas, 24,95 euros
Poco a poco descubrimos a Catherine Meurisse. Primero con su enciclopedia sobre literatura francesa y ahora con el volumen que facturó tras la matanza en Charlie Hebdó.

La levedad tiene mucho de manual de autoayuda y se agradece que no dé la chapa con definiciones del humor ni pierda el tiempo intentando comprender a los asesinos. Toda la primera parte describe muy bien el miedo y la angustia de los primeros días. Salvó la vida porque llegó tarde a la reunión de la revista, según explica debido a un desengaño amoroso. A partir de ese absurdo la autora busca razones para seguir tirando y finalmente las encuentra en un revelador viaje a Italia. Para mi gusto lo mejor llega al final, cuando redescubre la belleza en sus paseos romanos y reflexiona sobre el valor del arte en nuestras vidas. Un trabajo conmovedor y necesario.


Valerosas de Penelope Bagieu, edita Dibbuks - comic mujeres biografia
Valerosas de P. Bagieu
Dib•Buks, 2017.
144 páginas, 18 euros

Dejo para el final a Pénélope Bagieu, de quien se acaba de traducir Valerosas 1. El volumen agrupa pequeñas biografías, de cuatro a siete páginas cada una, de señoras ilustres.
Lo que llama la atención es que, salvo excepciones, no se fija en grandes celebridades sino en figuras aparentemente más modestas, pero que se crecen Tove Jansson y de la bailarina Josephine Baker, de una transexual y de jefas de estado y emperatrices, todo con un tono desenfadado y trepidante, todo interesante y ameno, aunque no se evitan aspectos tan desagradables y comunes como la violencia de género.
Pero no es en las zonas oscuras donde se pone el énfasis sino que Bagieu adopta una actitud general tremendamente positiva y contagiosa. Dirige un mensaje de aliento para las mujeres, que se muestran en sus páginas capaces de enfrentarse a cualquier reto. Y además al acabar la lectura uno se queda como con ganas de mejorar el mundo y con la idea en la cabeza de que tal cosa es posible, que no es tan complicado como suponíamos. Al menos así lo demostraron muchas de esas valerosas féminas. Si los argumentos se despliegan con arrolladora amenidad ese entusiasmo se traslada al brillante dibujo. Pueden encontrarse ecos de Rius, Blechman y otros dibujantes de humor, pero la autora recorre una senda personal y fresca, su trazo es fuerte y seguro y basta echarle un vistazo para percibir su talento de inmediato. No es su primera obra traducida al español y lo cierto es que hasta ahora me había pasado desapercibida. Intentaré corregir mi error. Mientras, no duden en adquirir este excelente trabajo que hace honor a su subtítulo: “Mujeres que solo hacen lo que ellas quieren”. Es una obra encantadora que emociona de forma inteligente y sensible.